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Últimos días de viaje, últimos momentos


En la puerta de Ingenia Global.

Ese dicho simple que dice que cuando uno sale de viaje está expuesto, es muy cierto y Murphy siempre está al acecho…
Escribo desde el Aeropuerto de Santiago de Chile (Nuevo, moderno funcional) son las 11:00 de la mañana del miércoles pero yo no debería estar aquí.
Mi vuelo con LAN está atrasado, tenía que salir hoy a las 19:55 y mediante un simple mail nos han comunicado que se pospone a mañana a las 15:30, sin más explicaciones, esto no me ha dado buena espina y gracias a Yolanda y a la agencia de viajes, he conseguido adelantar mi vuelo sin coste a uno de Iberia que sale dentro de una hora.
De todo esto me he enterado desayunando y los astros se han confabulado para que pudiese tomar este vuelo cerrándolo y decidiéndolo con unas 3 horas de antelación, tenía la maleta hecha, Pedro aún no había salido de casa, he vuelto, he cambiado mi traje por ropa de viajar y aquí estoy, trabajando en STARBUCKS chupando wifi porque ya no tengo iberia oro…tampoco viajo en salida de emergencias pero por lo menos llego unas 4 horas antes de lo previsto a Málaga. De la otra forma, de haber salido mañana a las 15:30, llegaría 27 horas después.
He encontrado un sitio con 2 enchufes, en uno cargando el iPad, en otro el portátil y el iPhone, cargando del portátil…
Como decía un entrenador mío cuando llegábamos de jugar fuera al llegar a Madrid (Allá por los noventa y poco) “Bueno Joaquín, uno más y uno menos…” así es con los viajes.
Ahora  queda, reflexionar, escribir sobre lo que ha pasado pero en clave de negocio solo (en el más polisémico sentido de la palabra (sólo) que ya no debe acentuarse para identificar su significado unívoco), ordenar ideas, definir acciones y ejecutarlas.
En Chile me dejo a compañeros y compañeras que están viviendo una experiencia vital que nunca olvidarán, recibiendo la recompensa del éxito a cambio del coste personal que significa estar tan lejos y el sobre esfuerzo de la distancia física y horaria, gente implicada, con ilusión y con mucho conocimiento y habilidades puestos al servicio de la generación de negocio.  Javier y Mao van camino de Lima, para dar otro empujón a las oportunidades de allí y de vuelta también mañana a España.
La recepción de nuestra compañía en Chile

Parece que fue ayer cuando llegamos a Santiago mirando para todos los lados, sin más oportunidades que nuestras ganas  y hoy ya somos una empresa consolidada con nombre y con entidad propia, nos faltan algunas cosas, pero nos sobran muchas y esas son las que nos hacen crecer cada día.
En las escaleras de nuestra compañía en Chile.

A mi vuelta, la vida sigue, tratando de abonar el terreno para seguir creciendo en la zona, facilitando las preventas, discutiendo estrategias, persiguiendo y sufriendo en la distancia pero cerca, ese día a día que os toca vivir solos cuando a vuestro medio día, el telón en España, se baja para la mayoría. Sois, esa rendija por la que tienen que entrar los rayos de luz que calienten las frías mesas vacías de la compañía…
Ya en Madrid, esperando mi vuelo a Málaga, sin haber pegado ojo en el viaje desde Santiago, comienza el reto de seguir presente sin estarlo.
Pronto, en apenas 2 semanas otros compañeros darán el salto y seguiremos intentando contar cosas interesantes.
Por cierto, enciendo el móvil y me entero de que hemos ganado una licitación,  así no está mal llegar...
Juntos cenando en el Giratorio...
Nota para ti que has leído esta historieta total o parcialmente: gracias, ni os conozco a todos, ni os veo a ninguno, pero las estadísticas de Blogger me han dicho que sois muchos.

Comentarios

  1. Y colorín colorado este viaje se ha acabado. Me alegro que ya estés en casa y feliz. Nos vemos, besitos.

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